Las rejillas son metal estirado obtenido de bobinas de materia prima con un espesor de entre 3 y 5 mm. Pueden obtenerse de distintos materiales, en función de las necesidades de aplicación: acero al carbono, acero inoxidable y acero galvanizado sendzimir. Su característica principal, debida al espesor de la materia prima, es la elevada resistencia mecánica. Para necesidades particulares se pueden utilizar también espesores mayores. La rejilla Fils 21 está certificada con el máximo coeficiente antideslizante (R13) según la norma alemana DIN 51130 que clasifica lo resbaladizo de las superficies de paso.
Rejillas estiradas
La amplia gama de rejillas Fils: estiradas, estriadas, aplanadas
Hay disponibles rejillas estiradas de malla romboidal y hexagonal con un ancho del módulo DL de 43 a 125 mm. Disponibles ya preparadas o realizables en las medidas solicitadas en proyecto. Las rejillas estriadas se obtienen de una chapa sólida que presenta pequeñas tiras de material en relieve (las denominadas estrías), que aumentan notablemente la rugosidad y por tanto las características antideslizantes. Las rejillas aplanadas se obtienen de algunas mallas que, después del estirado, se pasan por una máquina calandradora, que las aplana, es decir, reduce su espesor, llevando el espesor al de la materia prima inicial. La rejilla aplanada resulta lisa y plana y se utiliza en muchos campos para la protección de espacios o de maquinarias.
La ventajas y beneficios de las rejillas
Las rejillas de metal estirado son una solución práctica y económica para garantizar resistencia, seguridad y superficies de paso antideslizantes. Tienen una excelente relación entre resistencia y peso. La superficie presenta una fricción natural que deriva del proceso mismo de estirado y no requiere de elaboraciones adicionales. Las “crestas” de la rejilla constituyen pequeñas cúspides que impiden el deslizamiento y dan una sensación de seguridad a quien deba caminar por encima. Tienen la capacidad de garantizar elevadas cargas de funcionamiento para superficies de paso, según lo establecido en las normativas del sector, que requieren tanto la carga distribuida como la carga concentrada. Pueden cortarse a medida, plegadas, rebordeadas y galvanizadas para una mayor durabilidad.
